Soy Gladys, una mujer dominicana que llegó a esta tierra con metas claras y un propósito firme. El destino me trajo a Vidreres, un pequeño pueblo que hoy siento como hogar. Aquí descubrí mi vocación: ofrecer un servicio de limpieza que no solo sea eficaz y eficiente, sino hecho con pasión y alegría.
Cada espacio que limpio es una muestra de mi compromiso, y cada cliente satisfecho, una motivación para seguir creciendo. Cataluña me ha acogido con los brazos abiertos, y con Neteges Gladys, quiero devolverle ese abrazo, cuidando cada rincón como si fuera mío.